¿Debo bañar a mi gato? Cuándo, cómo y los 10 trucos para triunfar

por Alberto

Pensamos que bañar a un gato no es necesario, los gatos son muy limpios y suelen acicalarse ellos mismos. Pero sí habrá ocasiones en los que deberemos tomar parte en su limpieza.

Yo baño a mi gato la mayoría de los domingos, pero no siempre fue así. Los comienzos fueron duros y los arañazos en los brazos más frecuentes de lo que me hubiera gustado.

Es cierto que la mayoría de los gatos toleran bien un baño cada cierto tiempo pero hay algunos que no pueden o deben recibir baños. ¿En qué grupo está el tuyo? Si no lo sabes te voy a ayudar con todas las dudas y trucos.

¿Debo bañar a mi gato? Cuándo y cómo hacerlo

Mucha gente cree que lavar a un gato es tan sencillo como bañar a un perro, pero no tiene nada que ver. Son dos tareas que en la práctica no se parecen en nada. ¡Es mucho más complicado echar a un minino al agua!

Los gatos son animales delicados a la hora de recibir baños. Se les puede acostumbrar con facilidad si se conocen las técnicas adecuadas, pero también es fácil agobiarlos y lograr que tengan aversión al agua toda su vida.

Cuándo NO se debe bañar a un gato

Hay motivos para no bañar a mi gato

El gato es un animal con una ética de limpieza extraordinaria y todos pensamos que eso es suficiente, ¿verdad? No es tan sencillo, en realidad depende de cada animal y de sus circunstancias.

Si bien podemos darles un baño de vez en cuando como te contaré después, hay tres casos donde no debes bañar a tu gato o, al menos, deberás evitarlo salvo que sea imprescindible:

  1. Gatos con aversión extrema al agua: hay un buen porcentaje de gatos que no toleran bajo ninguna circunstancia el contacto continuo con el agua. En estos casos, salvo necesidad de salud, evita mojarlo.
  2. Gatitos con menos de tres meses: si tu gatito tiene menos de 90 días de vida, bañarlo puede comprometer su salud.
  3. Traumas pasados: la memoria de los gatos es increíble, nunca olvidan los episodios traumáticos. Si han tenido un episodio relacionado con el agua, entonces no querrá que lo fuerces a bañarse.

Motivos por los que sí puedes bañar a tu gato

Normalmente lo lógico es pensar que hay más motivos para no lavar a un gato que para hacerlo. Sin embargo, no tiene porque ser así siempre. Hay casos en los que será recomendable o incluso necesario.

Cada ocasión debe valorarse de forma única: no es lo mismo un gato adulto que uno joven, ni uno de exterior que uno de interior.

Suciedad que pudiera poner en peligro su salud

Baña a tu gato si acumula suciedad

En la mayoría de ocasiones un gato será capaz de limpiarse por sí mismo sin poner en riesgo su salud. En cambio hay otras situaciones donde debemos estar atentos para evitar que sean ellos los que se limpien, pues al usar su lengua, están expuestos a ingerir sustancias peligrosas para su salud.

Si tu gato sale al exterior revisa su piel y su pelo cuando llegue a casa en busca de manchas peligrosas para su salud, como aceite de coche, gasolina, etc.

Por ejemplo, si tu gato pasa con frecuencia por tu garaje o suele merodear cerca de coches, podría mancharse con residuos como la grasa o combustibles.

Este tipo de manchas son perjudiciales para su salud si son ellos quienes las eliminan de su cuerpo. En esos casos deberás bañarlo y, al terminar, él mismo podrá limpiarse a fondo sin riesgo alguno para su salud.

Incluso podría darse el caso de que tú mismo derrames sobre el animal algún liquido peligroso de forma accidental.

Limpieza en gatos de pelo largo

La raza importa. Un gato de pelo largo necesita más tiempo de limpieza que uno de pelo corto.

Mi gato Maine Coon requiere casi del doble de tiempo de limpieza que otro, un común europeo. No es raro mirar hacia el sofá y ver que, mientras uno está durmiendo, el otro sigue con su interminable tarea de aseo.

Es una buena idea ayudar a tu gato de pelo largo con su limpieza. El uso de un champú específico combinado con un cepillado profundo con un cepillo de púas anchas (que elimine todos los nudos) puede ser el complemento perfecto a las largas sesiones limpiezas que él realiza con su lengua.

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Gatos que salen al exterior a diario

Bañar a los gatos de exterior es beneficioso

Hay gatos que salen a pasear por el barrio, caminan por la tierra y se mueven entre la maleza. Al final del día la suciedad será inevitable.

Su propia limpieza podría no ser suficiente si se mueven por terrenos «pantanosos».

Si observas que tu gato no es capaz de mantener su pelaje limpio dale un baño de vez en cuando para echarle una mano. Te lo agradecerá. Hay gatos muy limpios y que no dejan de acicalarse hasta quedar perfectos, pero hay otros que no le prestan tanto interés.

Los gatos ancianos suelen limpiarse menos

Una de las características más habituales de los gatos mayores es que su limpieza diaria se va reduciendo, tanto en tiempo como en intensidad. Y en gatos de exterior esto puede ser un problema.

Como bañar a mi gato si es de exteriorSi detectas esta tendencia en tu gato anciano deberás ayudarlo con uno o dos baños mensuales. Así mantendrás su piel y su pelo en perfecto estado.

Tratamientos especiales de higiene prescritos por el veterinario

En ocasiones el veterinario puede prescribir un tratamiento para tu mascota que incluya baños. Por ejemplo, es habitual en gatos que tienen parásitos externos como pulgas o ácaros.

En estos casos tu gato no va a poder librarse de pasar por la bañera. Si le tiene mucha aversión al agua tendrás que acortar la duración del baño en la medida de lo posible, pero deberás hacerlo aunque sufra.

Recuerda que el refuerzo positivo no es solo una cuestión perruna, recompensar a tu felino con premios tipo snack os ayudará a sobrellevar situaciones que no le gusten y facilitará la tarea de repetirlo en el futuro.

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Gatos que disfrutan con el baño

Gatos que les encanta el aguaHe tenido dos gatos a que les encantaba un baño de vez en cuando. Aunque por naturaleza los gatos tienen aversión al agua, los que la disfrutan son más de los que creerías.

Un gato acostumbrado a darse un baño desde pequeño puede disfrutar mucho en la bañera.

Si tu gato se lo pasa bien con el baño tienes lo más complicado hecho. Ahora solo te falta gestionar una periodicidad razonable para los chapuzones y no abusar de ellos, ya que limpiar por exceso a tu mascota también es perjudicial para su pelaje y su piel.

Diez trucos y consejos para bañar a tu gato

Los gatos tienen buena memoria. Si asocian el baño a una experiencia estresante y negativa no te será sencillo revertir la situación. En cambio, si los primeros baños son tranquilos y agradables, pronto será pan comido.

Estos diez trucos y consejos te ayudarán a que el baño sea una experiencia divertida y exitosa para tu gato:

Organízate para tener al menos una hora libre

Baña a tu gato con tranquilidadCuando quiero bañar a mi gato siempre aparto dos horas sin obligaciones de ningún tipo. Además pongo el móvil en modo avión para evitar ruidos que alteren a mi gato o distracciones para mí mismo.

Por mi experiencia te aconsejo contar siempre con media hora de margen sobre el tiempo estimado. ¡Bañar a un gato es una aventura impredecible!

Es normal que las primeras veces tardes más de lo habitual. Conforme lo bañes más veces optimizarás el tiempo ya que, tanto tu gato como tú, estaréis más familiarizados con el proceso.

Deja que tu gato se calme

Los gatos son animales desconfiados. No hay nada peor para ellos que un futuro incierto así que, si es la primera o segunda vez que lo metes en el baño, lo normal es que se muestre nervioso.

Cuando yo quiero darle un ratito de limpieza a mi gato me gusta jugar con él durante diez o quince minutos en el propio baño. En ese rato aprovecho para ir llenando la bañera y que se familiarice con el ruido del agua.

Utiliza agua templada o un poco caliente

Una temperatura excesiva del agua es uno de los grandes errores que cometen muchos novatos a la hora de la limpieza de su gato. Puede que creas que el agua muy caliente es confortable pero a tu gato le molestará.

como bañar a mi gato con éxito

Si tu bañera dispone de grifo termostático sitúa el indicador en 30 grados. Si no se regula por temperatura un buen truco es poner el agua un poco por debajo de lo que a ti te parecería agradable para una ducha.

Por debajo de 30 grados tampoco es recomendable, ya que podrías acabar con tu gato en el veterinario a causa de un resfriado.

Baña a tu gato siempre con el estómago vacío

A los gatos les sienta fatal juntar la digestión con el baño. No es por el agua, es más por los nervios y por su estado anímico después de alimentarse.

Yo aprovecho los domingos a primera hora de la mañana (antes del desayuno) para el baño. Además así ejerzo el refuerzo positivo cuando acabamos con su comida húmeda favorita. Recuerda que es recomendable dar al menos 3 raciones de comida húmeda a tu gato a la semana.

Si tu gato no tolera bien el hambre y se queja todo el rato cuando os despertáis puedes darle un poco de latita un par de horas antes de su baño. Le ayudará a calmarse, pero asegúrate de darle poca cantidad.

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Utiliza un champú específico para gatos

Champú que uso para bañar a mi gato

Si utilizas un champú para humanos le provocarás picores y un mal lavado. En cambio con un champú específico para gatos como estos lograrás el resultado perfecto.

Para lavar a mis gatos siempre utilizo un champú muy suave de pH neutro. Este tipo de champús facilita el lavado y el cepillado posterior, respetando en todo momento la sensibilidad de la piel del animal.

Aunque te parezca tentador comprar un champú muy grande, no es necesario. Uno de los errores más comunes es echarle al gato demasiado champú, algo que acaba siendo contraproducente. Ahorrarás dinero y lavarás mejor a tu gato utilizando una cantidad pequeña.

No te pases con la profundidad del agua

Lo que mejor funciona para meter en la bañera a un gato es llenarla lo justo para que le cubra por debajo del cuerpo. De este modo tendremos el agua suficiente para trabajar la limpieza de su cuerpo sin causarle desconfianza por la profundidad.

Y mucho mejor que tu bañera (o la ducha) será utilizar un recipiente más pequeño donde él no se sienta abrumado y de donde sepa que puede salir cuando quiera.

Recuerda también que debes tener una superficie antideslizante en el fondo de la bañera o palangana. Si tu gato saca las uñas y se resbala en el fondo de la bañera le provocará ansiedad.

Cuidado con las orejas y los ojos

Puedes lavar a tu gato de forma enérgica por todo el cuerpo para eliminar bien la suciedad salvo en dos partes: las orejas y los ojos.

Mientras lo lavas tu gato plegará las orejas y cerrará los ojos por instinto, pero aún así intenta tener mucho cuidado.

Trucos para bañar a tu gato

El sentido auditivo de los gatos es magnífico. Pueden girar su orejas para escuchar el más mínimo ruido alrededor de su cuerpo, sin importar la dirección. El precio a pagar por ello es que están muy expuestas, lo que, sumado a su sensibilidad, da como resultado que debemos evitar que entre agua o cualquier químico como el champú.

El secado es tan importante como el lavado

Este paso es muy importante y por mi experiencia es el gran olvidado. Secar a tu gato por completo es tan importante como lavarlo bien.

El pelo de los gatos retiene mucha humedad, en especial en aquellas razas de pelo largo como los gatos Persa o el Maine Coon. 

Emplea las toallas que sean necesarias para absorber la humedad de su cuerpo. Por otra parte, si tu gato lo tolera, utiliza tu secador del pelo en la potencia mínima (tanto en velocidad como en temperatura).

La importancia del secado tras el baño

El secado es más importante en otoño e invierno, en especial si vives en un clima frío o resides en una casa donde la temperatura no supera los 20 grados.

Uno o dos baños al mes al mes como máximo

Que se pueda bañar a un gato de forma eventual no quiere decir que sea recomendable hacerlo con mucha frecuencia.

Tras preguntar a muchos veterinarios a lo largo de los años ninguno me ha recomendado más de un baño cada 15 días, salvo por motivos de fuerza mayor.

Cuando bañas a tu gato provocas cambios en su pelo y en su piel. Además tu mascota quiere tener su olor y no el del champú. Por eso mismo se lamerá durante horas después el baño hasta lograr recuperar su olor corporal.

Espumas de lavado en seco: la alternativa para lavar a un gato

Limpieza con espuma en secoMis gatos siempre han acabado aceptando el agua a base de paciencia y hacer las cosas con mucha calma, premios y cariño. Sin embargo es cierto que determinados felinos pueden rechazarla de forma tajante. ¿Entonces qué?

La solución en este caso es utilizar una espuma de lavado en seco. El resultado puede ser menos bueno que un lavado en agua, pero se trata de largo de la mejor solución para limpiar a un gato con miedo al agua.

Este tipo de champú seco o espuma contiene todo lo necesario para limpiar y nutrir la piel del gato. Funciona muy bien con todas las razas, y lo recomiendo también si tienes poco tiempo o si tu gato sufre picores con frecuencia, ya que tiene un alto poder de hidratación.

También se puede usar la espuma en seco como complemento del baño una vez al mes. En este caso lo recomendado es alternar un baño normal con otro en seco.

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